Encuentro con Jesucristo arciprestazgo 2.5

En esta oportunidad contamos con la guía y orientación de los padres Franz Monroy y Nelson Celi.

En esta tercera parte se reforzaron los primeros cuatro giros trabajados en las dos primeras sesiones del retiro (13 de septiembre y 11 de octubre):

1-    "Jesús presente en la desesperanza";

2-    "Jesús anuncia una nueva manera de ser, de pensar y de vivir";

3-    "Jesús presente en la escritura";

4-    "Jesús presente en el hermano y en la ciudad"; con el apoyo inicialmente de la lectura de la cita bíblica Lc 24, 13 – 21 y seguido con hojas de trabajo personal, las cuales contenían una reflexión sobre cada giro y una pregunta para trabajarla personalmente.

De la misma manera trabajamos los últimos tres giros que quedaron pendientes:

5-    “Jesús presente en la comunidad”;  

6-     “Hacia una comunidad misionera”, y

7-     “Una comunidad que vive la alegría del Evangelio y la libertad del amor”. Este último giro fue representado por un grupo de jóvenes y seminaristas de la parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe, de una manera sencilla, clara y alegre, la cual nos mostró lo importante y necesario que es dar a conocer a Jesús con alegría, sencillez y convencimiento de su presencia entre nosotros.

Compartimos enseñanzas del papa Francisco a través de intercambio con otros hermanos y con la iluminación del Espíritu Santo representada en una vela encendida que cada una de las personas recibió.

Finalizamos con la celebración de la Eucaristía. El grupo de música de jóvenes de la parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe estuvo con nosotros animando todos los espacios de oración, reflexión y Eucaristía.

Hubo entrega a cada uno de los participantes de un botón que representa el compromiso de nuestro arciprestazgo 2.5, con el Plan de Evangelización de la arquidiócesis de Bogotá y el trabajo en comunión. 

Hubo entrega por parte de nuestro arcipreste, el padre Franz Monroy, de un certificado de asistencia a cada una de las personas que participaron, como reconocimiento por el compromiso e interés por apoyar la implementación del Plan E.

La experiencia vivida en este retiro nos hace reflexionar y pensar que como animadores del Plan E debemos ser ejemplo de conversión para todos en nuestras parroquias y dar testimonio con alegría, humildad y convencidos de la presencia de Dios en la vida de cada uno y de la necesidad de salir en busca de Dios en el otro, en la ciudad, en la calle, en la vida cotidiana.